Aprobada la tasa a aseguradoras por el servicio de extinción de incendios

El Pleno Municipal de San Martín de la Vega ha aprobado la creación de una nueva ordenanza fiscal por el servicio de extinción y prevención de incendios, tras la tasa impuesta por la Comunidad de Madrid por más de 630.000 euros y que tratará de repercutir su coste a las aseguradoras de inmuebles.

El Pleno del Ayuntamiento de San Martín de la Vega ha aprobado la nueva ordenanza fiscal que regula el servicio de extinción y prevención de incendios, al que nuestro municipio se encuentra sujeto al haber superado el umbral 20.000 habitantes y tras la tasa anual de 630.000 euros impuesta por la Comunidad de Madrid, generando un importante desembolso para las arcas municipales, a razón de 30,939156 euros por vecino, con el fin de que repercutir su coste a las aseguradoras de inmuebles.

La Concejal de Hacienda Sonia Azuara ha indicado que “nuestro municipio recibió el pasado 7 de mayo una comunicación de la Comunidad de Madrid en la que se indicaba que a nuestro Ayuntamiento le corresponde abonar la cantidad de 628.188,62 € correspondiente al ejercicio 2024 en concepto de Tasa por la Cobertura del Servicio de Extinción de incendios y salvamentos de la Comunidad de Madrid” y que “hemos buscado las herramientas posibles para evitar que ello suponga un perjuicio económico al Ayuntamiento a sus vecinos”.

Para ello, con la nueva Ordenanza se repercutirá el coste a las entidades o sociedades aseguradores del riesgo al establecer como sujetos pasivos del contribuyente, en calidad de sustitutos, de forma que “serán las aseguradoras quienes asuman el gravamen de esta tasa, en la medida en que se benefician de forma particular de la prestación de este servicio de prevención y extinción de incendios porque disminuye el riesgo de que ocurra un siniestro y, en caso de que se produzca, la intervención del cuerpo de bomberos permite disminuir las indemnizaciones que estos sucesos suponen para las aseguradoras”, ha explicado Azuara,

En este sentido, ha explicado que “de acuerdo a los informes emitidos por la Intervención y la Tesorería Municipal, se espera recaudar entre 110.000 y 150.000 euros, lo que supone que el Ayuntamiento deberá asumir entre 490.000 y 450.000 euros, dado que ponerlo en marcha implicará un sistema muy complejo y difícil, como así nos aseguraron los Ayuntamientos consultados en las diversas reuniones que se han mantenido estos meses de cara a elaborar este texto, lo que nos ha obligado a tener que modificar levemente el tipo impositivo del IBI de forma provisional y hasta que alcancemos un nivel recaudatorio normal que permita devolver la estabilidad económica a nuestro ayuntamiento”.

Si bien desde el equipo de gobierno han considerado que esta tasa debería aplicarse “de forma progresiva, ya que no tiene sentido que por 300 habitantes más tengamos que abonar más de 600.000 euros, trabajaremos para que el proceso recaudatorio sea lo más eficaz posible y de esta manera tratar en años posteriores que la repercusión a nuestros vecinos sea la menor posible”, ha concluido la concejala.